CORE considera que tras las palabras del presidente de Cantabria sólo cabe la suspensión definitiva del concurso eólico.

Reacciones ante las declaraciones de Ignacio Diego sobre el plan eólico

A la luz de la entrevista al presidente regional D. Ignacio Diego y sus declaraciones sobre el concurso eólico, en las que ha afirmado que del mismo se puede derivar un “problema económico importantísimo”, que ha “conseguido meter a Cantabria en un lío jurídico que todavía no alcanzamos a determinar”  y  que “le puede salir caro a los cántabros”,  desde CORE pensamos que, en relación al concurso eólico,  no cabe más que la suspensión del irregular concurso.

Ahora el  Sr. Diego vuelve a confirmar las peores expectativas: dice que el concurso es el “gran cuento del tocomocho eólico”, afirma que las inversiones prometidas “no son creíbles”,  que las mismas no están cuantificadas, que no se han concretado los plazos y se pregunta cuánto vale lo que decían que iban a invertir.

A la vista de estas declaraciones debe determinarse qué empresas han querido estafar a los ciudadanos, cuáles deben apartarse del futuro reparto y quienes deben asumir las responsabilidades políticas por el engaño, especialmente si esto ha generado obligaciones económicas.

Se tiene que explicar con claridad, detalle y rigor qué es lo que se ofrecía, qué era lo realizable y qué no era cierto, cuántos los puestos de trabajo que realmente se aportaban, si se aportaba alguno, y las inversiones reales comprometidas en las distintas zonas como incentivo al desarrollo local.

CORE también solicita que los servicios jurídicos del Gobierno, informen de las implicaciones y alcance que tales acuerdos puedan suponer para los ciudadanos y si los mismos suponen algún compromiso con derivaciones económicas, en contra de lo que han venido sosteniendo los anteriores dirigentes políticos.

CORE pide, además, al Gobierno que se hagan públicas las cláusulas y condiciones de las adjudicaciones  del concurso eólico y que, al menos hasta que  se aclare el alcance de sus graves consecuencias anunciadas, se proceda de inmediato a la suspensión cautelar del concurso, para evitar que se puedan generar mayores  perjuicios, so pena de convertirse en cómplices del mismo.

Para CORE la jornada que el 27 de enero ha celebrado en Santander la Asociación Eólica de Cantabria tiene como única finalidad defender sus intereses particulares  y para ello no duda en presionar al Gobierno de Cantabria para que no cambie el plan eólico  e incumpla su compromiso de tramitar un plan energético transparente y que cuente con el consenso de todos.

CORE quiere recordar a la asociación eólica que el plan eólico del anterior gobierno estaba sobredimensionado y que además dejaba las puertas abiertas al destrozo paisajístico de nuestra región.

 CORE a favor de las energías renovables

La plataforma “Cantabros por la ordenación racional de la energía eólica” apuesta por un verdadero desarrollo de las energías renovables, pero no a costa del territorio y sus valores culturales y paisajísticos. Además, CORE cree que los planteamientos de la Asociación Eólica de Cantabria nada tienen que ver con la sostenibilidad y sí con el de cuidar sus intereses económicos y beneficiarse de las subvenciones del Ministerio de Industria.

CORE sugiere que  bien podría , en estos momentos de crisis, la Asociación Eólica de Cantabria emplear sus esfuerzos, sus presiones y  sus medios económicos, para conseguir un verdadero plan eólico que ponga en valor los beneficios que para la sociedad tiene la energía eólica, en vez de seguir empeñados en solicitar la ejecución de un concurso que se ha demostrado desmesurado y perjudicial para la región como reconoce incluso el Plan Energético de Cantabria en tramitación, que califica como severa la afección territorial del planteamiento que propone el concurso eólico.

 Un PLENERCAN ajustado a las necesidades de Cantabria

Para CORE el PLENERCAN que sacó a exposición pública el anterior gobierno, parecía estar elaborado a la carta para dar cabida a los proyectos de parques eólicos aprobados en el Concurso eólico, en vez de evaluar cuanta energía eólica cabría en Cantabria sin afectar significativamente a la biodiversidad, patrimonio cultural y paisajístico.

Desde CORE esperamos, por tanto, una rebaja significativa de la potencia eólica asignada y, sobre todo, que se ponga sobre la mesa una adecuada zonificación que establezca áreas de exclusión que no dejen en manos de los promotores eólicos la ubicación de los parques eólicos, en especial los valles del sur de Cantabria que parecen ser un objetivo muy codiciado por la industria eólica.

En los dos últimos años se ha solicitado la instalación de 23 antenas medidoras** en los municipios de Valderredible, Valdeprado del Río, Valdeolea y Campoo de Enmedio que se suman a las seis ya instaladas durante el mes de diciembre. CORE considera que las empresas eólicas dan por hecho que el sur de Cantabria será una de las zonas de desarrollo preferente de parques eólicos, hecho que va en contra de las demandas de CORE de que se proteja y excluya esta zona del desarrollo eólico.

Valores culturales, paisajísticos y ecológicos del sur de Cantabria

El sur de Cantabria es una zona que debe ser protegida por su especial significación territorial, al situarse como elemento conector ecológico básico dentro de la cordillera, a medio camino entre la montaña palentina y los valles pasiegos, todo ello en una zona  de valores medioambientales altísimos, recogidos como tales en todos los  planos de documentación del medio físico de Cantabria. Estos municipios se encuentran en el área que conforma la denominada “Zona del románico sur”  y está expresamente protegida por el vigente Plan energético, prorrogado recientemente, atendiendo a sus valores paisajísticos y culturales.

Torre de Pozazal

El nuevo PLENERCAN debe contener un catálogo de zonas de exclusión que incluya estas zonas

CORE teme que esta avalancha de solicitudes de antenas medidoras se transforme en parques eólicos dejando en papel mojado las palabras del Consejero de Industria Eduardo Arasti de que el nuevo plan eólico será consensuado. En palabras de José Miguel Martínez, portavoz de la Plataforma de defensa de los valles del sur de Cantabria: “Se da la circunstancia,  que los lugares de ubicación de las antenas tienen un gran valor natural y cultural, tanto el monte Endino, como Pozazal, Siete Cruces y monte Tabla. Y aunque se trate de antenas de medición sabemos que detrás de cada una hay un proyecto de parque eólico”.

El monte Endino de nuevo amenazado

En algunos casos se vuelven a solicitar antenas en lugares donde se han rechazado proyectos eólicos en varias ocasiones, como es el monte Endino en Valdeolea, lugar incluido dentro de la ZONA DE PROTECCIÓN DE OSO PARDO y en los hábitats de varias especies de aves rapaces incluidas en elCatálogo de Especies Amenazadas de Cantabria y en el Anexo 1 de la Directiva Aves, lo que obliga de un modo expreso, por ley, a la protección  de los mismo. Concretamente la autorización para instalar una antena en el Monte Endino en Valdeolea, afectaría de lleno a un área de uso frecuente de oso pardo, tal y como ha confirmado la Fundación Oso Pardo que se opone rotundamente a esta instalación.

**Tabla con la relación de antenas instaladas y solicitadas en los municipios del sur de Cantabria.

Municipio	Nº Antenas	Solicitadas	Instaladas
Valdeprado del Río	6	Monte Lojudo, Peña Castillo, La Cotorra, Las Mazuelas, Sotillo, Cuesta La Milla (Mediadoro)
Valdeolea	4		Monte Endino,  Monte Siete Cruces, Peña Tabla y Puerto de Pozazal
Valderredible	15	Biguenzo, Bustillo del Monte, Coroneles, Rasgada,Valdelomar, Susilla, Otero, Salcedo, Población de Arriba, La Serna, Población de Abajo, Montecillo, La Lora-Rocamundo, Rucandio, Allendelhoyo,
Campoo de Enmedio	3	Cotío Retortillo, otra en Celada hacia Somaloma, en Pico Ropero	Monte Somaloma

Core espera que Industria plantee un plan eólico que tenga en cuenta sus alegaciones

La reunión mantenida el pasado siete de noviembre con el consejero de industria Eduardo Arasti y su equipo para tratar sobre el PLENERCAN y el futuro plan eólico ha servido para conocer de primera mano las intenciones de la consejería sobre el futuro plan eólico. Aunque en dicha reunión no se han puesto sobre la mesa ni datos ni cifras concretas en cuanto a potencia eólica se refiere, si se nos ha manifestado que la intención del ejecutivo es cumplir escrupulosamente con la legalidad y con los estudios de impacto ambiental. Del mismo modo, el consejero nos trasladó su voluntad de consensuar lo máximo posible con todos las partes implicadas el futuro PLENERCAN.

Aunque las palabras del consejero son recibidas positivamente, desde CORE debemos seguir insistiendo en que se atiendan buena parte de las alegaciones presentadas el pasado mes de agosto al PLENERCAN redactado por el anterior gobierno. En este sentido para CORE sigue siendo fundamental que la potencia eólica que se instale sea proporcional a la población y territorio de Cantabria y,sobre todo, que se establezcan con claridad áreas de exclusión basadas en criterios ambientales, culturales y de paisaje.

Desde CORE insistimos en que el PLENERCAN no debe hacerse para dar cabida a los proyectos de parques eólicos aprobados en el Concurso eólico sino para evaluar cuanta energía eólica cabría en Cantabria sin afectar significativamente a la biodiversidad, patrimonio cultural y paisajístico.

Las alegaciones de CORE cuestionaban el injustificado exceso de potencia asignado a la energía eólica, la falta de una zonificación ylos mitos de la autosuficiencia energética y la generación de empleo. Además el propio Informe de Sostenibilidad Ambiental del PLENERCAN valoraba los impactos de la energía eólica como ALTOS sobre la vegetación, avifauna y la conectividad ecológica del territorio de nuestra región, y MUY ALTO con respecto al Paisaje.

Esperamos por tanto una rebaja significativa de la potencia eólica asignada (recordamos que sigue sin justificarse el descomunal aumento de potencia que se pretende imponer)  y sobretodo que se ponga sobre la mesa una adecuada zonificación que establezca áreas de exclusión, que no dejen en manos de los promotores eólicos la ubicación de los parques eólicos, en especial los valles del sur de Cantabria, parte importante del llamado “País Románico”, que parecen ser un objetivo muy codiciado por la industria eólica.

CORE CONSIDERA QUE LA SENTENCIA DEL TSJC PONE EN ENTREDICHO LOS PROCEDIMIENTOS DE EVALUACIÓN AMBIENTAL DE PARQUES EÓLICOS

La sentencia de la Sala de lo Contencioso que anula los proyectos de ejecución del Parque Eólico de Somballe y del Parque Eólico de Lantueno, en los términos municipales de Santiurde de Reinosa y Campoó de Enmedio evidencia la ligereza con la que se  tramitan ambientalmente los parques eólicos no sólo en Cantabria sino en el resto de España.

Esta sentencia del Tribunal Supremo es un elemento más, que demuestra que en España el procedimiento de evaluación de impacto ambiental está viciado y que hay que volver a refundarlo. Según datos de SEO/BirdLife, la práctica totalidad de autorizaciones de proyectos eólicos en España se lleva a cabo sin evaluar el impacto que tendrá asociado a otros proyectos construidos o proyectados.

Debido a los importantes impactos de los parques eólicos, es necesario una adecuada planificación y evaluación que evite la promoción y autorización de parques eólicos en las zonas ambientalmente más sensibles. La energía eólica no es sostenible solo por el hecho de ser renovable, para ello se debe ser responsable y evitar los impactos ambientales.

CORE viene defendiendo desde el principio que el desarrollo eólico debe venir precedido de una Evaluación Ambiental Estratégica del conjunto de parques que se vayan a instalar y esperamos que el Gobierno de Cantabria tome buena nota de ello.

Desde CORE estamos a la espera de saber cuál va a ser el posicionamiento final del Gobierno de Cantabria con respecto al PLENERCAN en trámite y esperamos que se hayan tenido en cuenta las alegaciones que, a través de varios de los colectivos que integran la plataforma, se presentaron el pasado mes de agosto.

El PLENERCAN que sacó a exposición pública el anterior gobierno, parecía estar elaborado para dar cabida a los proyectos de parques eólicos aprobados en el Concurso eólico, en vez de evaluar cuanta energía eólica cabría en Cantabria sin afectar significativamente a la biodiversidad, patrimonio cultural y paisajístico.

No sólo nuestras alegaciones muestran las incongruencias del documento como son el injustificado exceso de potencia asignado a la energía eólica, el mito de la autosuficiencia energética y la falta de una zonificación, sino que el propio Informe de Sostenibilidad Ambiental valora los impactos de la energía eólica como altos sobre la  vegetación, avifauna y murciélagos, sobre la conectividad ecológica  y muy alto con respecto al Paisaje.

 Esperamos por tanto una rebaja significativa de la potencia eólica asignada y, sobre todo, que se ponga sobre la mesa una adecuada zonificación que establezca áreas de exclusión que no dejen en manos de los promotores eólicos la ubicación de los parques eólicos.

CORE considera que la noticia publicada por El Mundo reitera las irregularidades del concurso eólico

El pasado sábado (ver adjunto) se hizo público el contenido del escrito remitido en julio de 2010 al anterior Consejero de Industria, Sr. Sota, por el Subdirector General de Biodiversidad y miembro de la Comisión Técnica de Evaluación del Concurso Eólico, D. Antonio Lucio, en el que éste denunciaba diversas irregularidades en la adjudicación del concurso eólico.

Según dicho escrito, no se permitió a la referida comisión, el órgano competente para ello, que puntuara las diferentes ofertas, como era su función, ni se le entregó el informe definitivo de evaluación, ni se le permitió formular recomendaciones para optimizar las garantías ambientales, ni se le comunicó el nombre de los asesores externos que, sustituyendo a la comisión y junto con Genercán, puntuaron las ofertas.

Dada la gravedad de estos hecho que se han dado a conocer ahora y que vienen a confirmar las sospechas que desde CORE se han tenido siempre sobre estas adjudicaciones plenas de irregularidades, el Gobierno de Cantabria debería anular ya el concurso eólico antes de que lo hagan los tribunales y debería investigar a fondo y explicar a los ciudadanos cuáles fueron realmente los criterios por los que las adjudicatarias ganaron este concurso.

Recordemos que estamos hablando de un concurso sobre el que el TSJ de Cantabria ya dijo que no tuvo la preceptiva evaluación ambiental, del que el Defensor del Pueblo declaró que se había realizado de modo inverso al que indica la lógica y que tenía apariencia de fraude de ley; un concurso que se dijo avalado por un estudio de la Universidad de Cantabria al que durante su tramitación la propia Consejería de Industria le negó toda validez, y en el que incluso participó como asesor al menos un consejero de una de las empresas que resultó adjudicataria. Un concurso que para colmo se vio salpicado por la denuncia pública nunca desmentida de que una empresa de publicidad muy vinculada a uno de los socios del Gobierno de Cantabria solicitó a las empresas concurrentes, y recaudó de algunas de ellas, fondos millonarios “para promocionar la energía eólica”.

Reunión con el Consejero de Industria y alegaciones al PLENERCAN

A la espera de poder mantener una reunión con el Consejero de Industria, Eduardo Arrasti, para conocer qué planes tiene la Consejería en torno al PLENERCAN del anterior Gobierno, CORE se dedicará este verano a preparar un extenso documento de alegaciones referidas al mismo, si bien entendemos que la solución ideal sería la anulación del referido plan hecho a medida del concurso eólico, y la redacción de uno nuevo respetando los requisitos legales.

Para CORE resulta prioritario anular el concurso eólico para evitar que las empresas puedan generar derechos indemnizatorios.

Desde CORE consideramos urgente la anulación del concurso eólico para evitar que las empresas adjudicatarias sigan avanzando en sus proyectos y así generen posibles derechos indemnizatorios que comprometan las decisiones del nuevo gobierno de Cantabria.

Solicitamos que se redacte un auténtico Plan Eólico, de acuerdo a las capacidades de acogida de nuestro territorio, que valore de manera realista los beneficios económicos y laborales, y se consideren los impactos sobre la biodiversidad, el patrimonio cultural o el paisaje.

 

Asimismo, desde CORE propondremos unas líneas de actuación que puedan servir de ayuda en la redacción del nuevo plan energético, ya que entendemos que este plan debe huir de la serie de falsas premisas que se introdujeron en el anterior PLENERCAN como son el mito de la autosuficiencia energética para justificar el aumento de potencia.

También trasladaremos al nuevo equipo de gobierno un documento de trabajo que recoge las reflexiones y opiniones de las personas expertas que a lo largo del último año han participado del debate público acerca del plan eólico del anterior gobierno.

Por último,  CORE valora positivamente que el nuevo equipo de gobierno incorpore a personas que se han manifestado públicamente en términos compartidos por nuestro colectivo acerca del Plan Eólico y esperamos que en su responsabilidad de gobierno apliquen estas ideas.

Las declaraciones de Ignacio Diego afirmando que su gobierno encargará un nuevo Plan Energético que cuente con la opinión de la sociedad, suponen para CORE una alegría, en cuanto que corrige los excesos y la falta de participación del anterior plan. 

CORE considera que Ignacio Diego ha sabido recoger el sentir de buena parte de la sociedad cántabra que venía reclamando un plan eólico racional y adaptado a la realidad de nuestro territorio. CORE espera que el nuevo presidente del Gobierno de Cantabria haga realidad estos planteamientos y presente a los cántabros un plan eólico que no suponga una agresión a la biodiversidad ni a nuestro paisaje y patrimonio cultural.

Como ya venimos manteniendo, CORE no se opone a la energía eólica y defiende que su desarrollo en nuestra región esté adaptada a la capacidad del territorio para acoger este tipo de energía.

Además, Core solicita  se anule de inmediato el concurso eólico anterior , realizado, a su entender, en contra de la ley, de la lógica y del interés general, ya que todavía no da derecho a las empresas adjudicatarias a reclamación alguna. De esta manera, se evitaría que en su desarrollo puediese dar lugar a indemnizaciones inasumibles por la sociedad cántabra.

Por último, desde CORE  queremos ofrecer al nuevo Gobierno nuestra colaboración desinteresada en los trabajos de  redacción del nuevo
desarrollo eólico, y transmitirle nuestra  voluntad de participar  de manera activa en el proceso aprobación  del mismo con el objetivo de 
conseguir un  mejor  Plan Energético  para toda la sociedad cántabra

 

Se trata de un PLENERCAN a la carta para los intereses de las industrias adjudicatarias del concurso eólico

Para CORE no ha sido una sorpresa el anuncio de que el nuevo PLENERCAN incorporará 1500MW de energía eólica, cinco veces más de la contemplada en el anterior plan energético  y a nuestro juicio totalmente desproporcionada para nuestra superficie , población y características de nuestro territorio.

Criticamos que el PLENERCAN se base en una falsa premisa como es  “la autosuficiencia energética” de la región, como si viviéramos en una republica independiente o nos fuera a costar la energía más cara por venir de otra comunidad autónoma. El PLENERCAN debe basarse en la capacidad del territorio para acoger a estas fuentes de energía y no para satisfacer intereses económicos.

Nos llama la atención lo rápido que el Consejero de Industria bendice ambientalmente el plan, sin esperar a la consulta pública o a la evaluación estratégica ambiental de la Consejeríade Medio Ambiente. Por lo que se ve, parece que lo tienen ya todo arreglado.

En un primer análisis queda claro que los planes del Gobierno de Cantabria seguirán siendo los de trasladar el modelo del “ladrillo” a la montaña. Con esta disposición lo que se pretende es legalizar la adjudicación irregular del concurso eólico y el reparto  del territorio de Cantabria  a las empresas eléctricas y constructoras, atendiendo a sus intereses económicos.

CORE no puede sino lamentar  profundamente la estrategia del gobierno, que  vuelve a impedir  el debate a la ciudadanía en un asunto de tanta trascendencia para la región. Saca  este plan, el último día de la campaña electoral, sin que dé tiempo material a  conocer su contenido, ni  estudiar, ni debatir sus propuestas, como debería ser preceptivo en un régimen democrático y participativo.

CORE se pregunta: ¿Por qué no han permitido a los ciudadanos conocer y opinar antes de las elecciones el Plan?  ¿Habrá democracia real de una vez en esta región?